Buscaban el perro de la Policía en redes y había sido capturado por Control Canino

“SE BUSCA EL PERRITO DE LA POLICÍA 

Es un labrador grande se perdió en el día de ayer. Si lo ves retenelo POR FAVOR. Dejamos contacto 2974 00-7471 COMPARTIR”

Eso rezaba la publicación en Huellitas Frías sobre la desaparición del perro durante este fin de semana. El can, que no se trataría de un animal adiestrado si no de uno que había quedado sin hogar luego del fallecimiento de su dueño y había sido adoptado por miembros de la fuerza; fue buscado intensamente hasta que el propio grupo mascotero dio a conocer que estaba en poder de Control Canino.

Esto despertó todo tipo de comentarios y reacciones en redes sociales. “Espero que la gente de comisaría pueda sacarlo de ahí, pobrecito”; “Hay cientos de perros sueltos y justo lo capturaron a él?”; “SIEMPRE AGARRAN PERRITOS MANSOS PORQUE A LOS QUE MUERDEN NO SE ACERCAN!”; o “desde que estaba en Comisaría se encargaron de vacunarlo, castrarlo y que esté ahí cuidado y de recorridas acompañando ya que es un perro adulto también”; fueron algunos de los mensajes de los vecinos que se pudieron leer.

La forma en que se mueve el área municipal no deja de ser controversial. Si bien hay cosas positivas como la colocación de chips y la vacuna antirrábica, los vales de castración para que los vecinos no tengan que pagar el precio completo, o las campañas de castración gratuita que a veces se realizan; lo cierto es que genera mucha polémica el tema de la captura de animales.

Aun cuando desde el área lanzan mensajes a la comunidad advirtiendo que “perro suelto en la vía pública será capturado”, que hay una tolerancia de 48 horas para buscarlo antes de ponerlo en adopción (y altas tarifas a pagar para retirarlo); no son pocos los vecinos que denuncian en las redes sociales que solo ‘levantan’ perros mansos, tranquilos o que se evitan las zonas más conflictivas con animales sueltos y agresivos. Incluso no faltan quienes dicen que hay perros maltratados o en malas condiciones que no son retirados de manos de dueños tan irresponsables como los que dejan sueltos a los suyos.

Todo lo aquí expuesto, es fácilmente constatable con la realidad: No hace falta más que irse a los barrios más alejados de las calles céntricas, o tratar de circular a pie, bicicleta o moto por ellos, para darse cuenta de la falta de atención que hay en esas áreas a un problema que no es solo grave para los animales, sino también para los vecinos expuestos a ataques o posibles accidentes.

Si a esto sumamos que no se conocen imágenes actuales de las condiciones en las que están los animales capturados en el galpón de Control Canino, el malestar crece por una problemática que, lejos de solucionarse, parece solo taparse. La solución a esta realidad debe basarse en la buena convivencia, la responsabilidad y la empatía. Todas cosas que caben por igual, tanto a los vecinos como a las autoridades.

 Imágenes de hace más de un año, de las pocas que se conocen del galpón de Control Canino (todas pertenecen a la Municipalidad de Puerto Deseado):